Sí se podría impugnar un testamento realizado ante Notario, aunque es poco frecuente ya que a la hora de realizarlo el Notario tiene en cuenta todas las formalidades legales que este debe de contener además de no incurrir en defectos formales, pero puede surgir que existan elementos u omisiones que puedan ser impugnables.
Según las disposiciones legales vigentes, el redactor de un testamento no tiene la facultad de prohibir la impugnación del mismo. Sin embargo, es posible incluir una cláusula en el testamento en la cual se establezca que, en caso de que un heredero decida impugnarlo, solo recibirá la parte correspondiente a su legítima estricta.
¿Qué significa impugnar un testamento?
La impugnación de testamento brinda la posibilidad de modificar las disposiciones establecidas por el fallecido en su testamento.
Nuestro ordenamiento Jurídico reconoce la libertad de testar sin embargo, también establece ciertos derechos sucesorios imperativos, por consiguiente, a través de este procedimiento, cualquier individuo tiene la posibilidad de hacer valer sus derechos sucesorios en caso de haber sido excluido, ya sea de manera voluntaria o involuntaria, de la sucesión hereditaria. Además, es posible iniciar el proceso de impugnación de testamento cuando existan circunstancias que ameriten su anulación.
Este acto está implícito dentro del procedimiento civil mediante el cual puede manifestar el desacuerdo con:
- La voluntad hereditaria del fallecido: En esta situación se contemplan las disposiciones testamentarias que puedan afectar los derechos legítimos de los herederos.
- La forma de otorgarlo: se incluyen cuando hay defectos formales o vicio en la voluntad del testador.
Si el impugnante cuenta con la protección de la ley, se procederá a modificar el testamento para asegurar el pleno cumplimiento de todos sus derechos sucesorios.
En el caso de que la impugnación del testamento sea respaldada por las disposiciones legales correspondientes, se llevará a cabo un proceso de revisión y modificación del testamento original. El objetivo de esta modificación es garantizar que el impugnante reciba todas las disposiciones y derechos sucesorios que le corresponden de acuerdo con la ley vigente.
En los casos más radicales originará la anulación del testamento, por lo que se adecuará la herencia a las normas de sucesión abintestato (código civil).
¿Cuáles son los motivos para impugnar un testamento?
Podemos hacer referencia a varios motivos de impugnación:
En la forma de otorgarlo:
- El testador no incluya en el testamento a un legitimario o heredero forzoso: esta causa se conoce como preterición. Hay que tener en cuenta que la herencia o caudal hereditario se divide en tres partes (legítima, mejora y libre disposición). El testador no puede privar a los herederos forzosos de su legítima, salvo en los casos permitidos por la ley (desheredación), en el caso de que el testador omita a un legitimario puede ser intencional o errónea, por ejemplo cuando el testamento se ha realizado antes del nacimiento de unos hijos, los cuales han sido omitidos en el testamento realizado previo.
- No respetar las cuotas de legítimo: también es el supuesto en el que el testador no haya respetado la cuota que corresponde por legítima a un heredero forzoso, este podrá impugnar el testamento solicitando su parte.
- Incapacidad del testador: cuando un testador ha estado incapacitado judicialmente, es su tutor legal quien se encarga de su tutela y puede utilizar su posición para convencer al progenitor tutelado de cambiar testamento así como engañándole o no explicarle adecuadamente dichos cambios.
- Capacidad legal del testador: Esto ocurre cuando el testador no tiene la edad suficiente para poder testar o cuando este no tiene una capacidad psicológica para otorgarlo. Por lo tanto, en caso de impugnar un testamento, es necesario que expertos en el campo realicen una evaluación del presunto incapaz en el caso de que aún esté vivo, o realicen una autopsia psicológica en caso de defunción. Por lo tanto es muy importante que la persona que deja su herencia presente aptitudes mentales necesarias para ubicarse en el tiempo y espacio, reconocer a las personas implicadas así como sus lazos familiares y afectivos o conocer el valor que tienen sus propiedades.
- Violencia, coacción o fraude: se produce cuando una persona hace testamento bajo amenaza, intimidación o engaño, este testamento podría ser nulo e impugnado. La utilización de violencia o intimidación sobre quien realiza un testamento asume un delito de extorsión aplicado en el art 243 del Código Penal. Sí además se empleó en la extorsión, una violencia física, se castigara además por el delito que corresponda.
¿Quiénes pueden impugnar un testamento?
Los herederos podrán impugnar un testamento. De acuerdo con la ley, aquellos que tienen derechos hereditarios tienen el derecho legal de impugnar un testamento si consideran y pueden demostrar cualquier forma de manipulación, engaño o errores formales en su redacción
Un heredero tiene el derecho de ver disconformidades en el contenido de un testamento y se puede acoger a la impugnación en caso de que vea que no se ha respetado el reparto legítimo o que se ha incurrido en otros motivos que hemos nombrado anteriormente.
¿Puede el testador prohibir la impugnación del testamento?
El testador no tiene la facultad de prohibir la impugnación del testamento, pero sí puede incluir en una cláusula del testamento que, en caso de que un heredero decida impugnarlo, dicho heredero recibirá exclusivamente lo que le corresponde por legítima estricta, de acuerdo con el artículo 675 del Código Civil.
¿Cuál es el plazo para impugnar un testamento?
El plazo para impugnar un testamento es de 15 años a partir del fallecimiento del testador. Es importante tener en cuenta que este plazo puede comenzar a contar desde el momento en que se recibe una copia del documento, si la lectura de la herencia no se realiza inmediatamente después del fallecimiento del testador.
Este plazo específico se aplica en el caso de un testamento ológrafo, que es aquel que ha sido escrito de puño y letra por el testador y no ha sido otorgado ante notario. En este tipo de testamento, se establece que tiene validez hasta cinco años después del fallecimiento del testador.
El testamento no puede ser impugnado si la parte de la herencia reflejada en el testamento ha sido aceptada.
¿Dónde puedo acudir para impugnar un testamento?
Para que la impugnación de testamento tenga éxito será preciso que participe en el proceso un abogado especializado en Herencias y Sucesiones, además en estos procesos es obligatoria su participación así como la de procurador.
Para dar inicio al procedimiento de impugnación, es necesario presentar una demanda judicial en el juzgado de primera instancia correspondiente al domicilio del fallecido. La impugnación de un testamento sigue los trámites del juicio ordinario, ya que se considera que la cuantía del mismo es indeterminada.
Los pasos a seguir serán los siguientes:
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Respuesta de los coherederos.
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Audiencia previa.
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Celebración del juicio.
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Resolución judicial.
¿Necesitas un abogado en herencias que te asesore?
Como hemos indicado, la impugnación de testamento es un proceso complicado y con largos plazos, por lo que lo más recomendable es ponerte en manos de un abogado especialista en herencias que valore las circunstancias del caso y vea las distintas posibilidades existentes y veraces para lograr el objetivo y desde Sucesionem Maireles Abogados nos ponemos a su disposición para ayudarle y asesorarle en todo el proceso.